El clavel chino, también llamada clavel del poeta (Nombre científico Dianthus Barbatus) es una flor que deberías tener en tu jardín si lo que quieres es otorgarle un aspecto colorido, pero muy clásico. ¿Quieres saber más sobre él?
Sigue leyendo para que sepas no sólo qué es, si no también todo sobre los cuidados del clavel chino, y las plagas que podrían dañar tu ejemplar.
Por cierto, también le recomendamos lea la ficha del clavel: clavel.
¿Sabes qué es el clavel chino?:
Para todos los amantes de la jardinería el clavel chino es una flor muy querida debido a la vasta paleta de colores que ofrece, la misma que se combina con un dulce aroma y una apariencia dentada muy propia de este tipo de flores.
Podría decirse cómodamente que esta flor es, en compañía de las rosas, de las flores que más se conocen alrededor del mundo, como también las que tienen una mayor demanda por parte de los consumidores. Lo que hace que su comercio sea un éxito para cualquier inversionista de la jardinería.
La familia de los claveles es muy numerosa en lo que a sus especies respecta, tiene un poco más de 250 variedades para cautivar al mundo. Estas no sólo les permiten a las personas armar ramos de flores de otro mundo, si no también decorar sus balcones, o jardines, de una forma pintoresca.
Características del clavel chino:
La principal característica del clavel chino es el ser reconocida como una flor bianual, lo que quiere decir que necesitará de una buena iluminación, y de un sol pleno, si queremos que la misma crezca de una manera fuerte y pueda abrirse en toda su amplitud.
En cuanto al suelo donde es plantada, podemos decirte que necesitará ser fértil, muy rico en los minerales necesarios, y también deberá tener un gran drenaje para que este no se encharque. De llegar a verse en esta situación podría terminar con la vida del ejemplar.
El florecimiento del clavel chino se lleva a cabo entre los meses de junio y agosto. Al igual que los otros tipos de claveles, esta es una flor muy perfumada. El aroma podría describirse como fuerte, pero no lo suficiente para que llegase a disgustarles a quienes están alrededor. Este sirve para ahuyentar a los insectos.
En cuanto al tamaño del clavel chino, se han podido ver ejemplares que llegan a los 25 centímetros. Algunos pueden que alcancen los 30, y otros que se mantengan por debajo de la medida antes mencionada. Es importante que las mismas sean plantadas con 25 centímetros de espacio una de la otra.
Puede decirse cómodamente que el clavel es una adquisición inteligente sin importar si la hace una persona experta en la jardinería, o un principiante. La variedad de colores que posee es impresionante, entre los más comunes se pueden mencionar al fucsia, el blanco, el rojo, el rosa, y el salmón.
De igual manera, los colores del clavel chino también suelen mezclarse. En sus ejemplares más llamativos podremos notar un punto de origen blanco, que cambia hasta transformarse en un fucsia estridente. Todo dependerá de la suerte con la que puedas conseguirla.
La mejor forma de reproducirlos es por semillas, tiene un crecimiento rápido y en pocos meses tendremos nuestros claveles del poeta llenos de flores.
Si quieres comprar semillas, te dejamos 3 opciones:
Cuidados del clavel chino:
Anteriormente te hemos mencionado que comprar un clavel chino era una adquisición inteligente, sin importar si se es un experto o un aficionado en la jardinería, y es que sus cuidados se basan en tres simples condiciones que cuidar: la luz, el suelo, y el riego.
Luz – Iluminación:
Los claveles chinos son plantas de sol pleno, esto quiere decir que necesitar ser expuestas día a día. La mejor opción para plantarlas, debido a esto, es en exterior, en nuestro jardín. Sin importar si quieres que estén directamente en el suelo, o colocarlas individualmente en algunas macetas de plástico o arcilla.
La sombra no le hará ninguna gracia a esta flor, por lo que debes evitar tenerla en los espacios cerrados, o los que le brindarán algún tipo de oscuridad. Esto podría producirle fácilmente la muerte a la planta. Dentro de una casa, el mejor lugar para tenerla es en el balcón.
Suelos:
Las características del suelo para el clavel chino son sencillas. Este debe estar bien drenado, a esta flor no le hará ninguna gracia si se trata de un suelo que cuenta con un exceso de humedad. En cuanto al abono, se recomienda el uso de uno ligero, mejor si se trata de sustratos naturales.
Para aquellos jardineros especialistas, estas plantas necesitarán un poco de fósforo para que se dé el buen enraizamiento. También, si lo que quieres es apostar por un follaje de primera, entonces puedes optar por proporcionarle un poco de nitrógeno. ¡No digas que no te lo dijimos!
Riego:
El riego del clavel chino es sencillo, este debe hacer a diario y con una cantidad de agua regulada. Si vives en una ciudad donde el sol sea realmente imponente, entonces lo mejor será que lo hagas en horas de la tarde. Alrededor de las 6:30 p.m. debería ser una buena hora.
Todo esto se hace con la finalidad de que no se cree el efecto lupa, que es conocido por dañar las plantas. También es importante que te fijes, sobre todo en los días más calurosos, cómo están las hojas de tu planta. En el caso de que estén flácidas, y con hojas blandas, deberás duplicar la cantidad de agua.
Plagas y enfermedades que podrían afectar al clavel chino
Las principales plagas que atacan al clavel chino son las babosas estas les encanta alimentarse de los tallos de los claveles, como también de sus flores, yemas y hojas. Esto puede ocasionarle agujeros a la planta.
Entre los insectos que se presentan en cantidades numerosas están los pulgones, estos se encargan de chupar la sabia para que la planta se debilite. Esto hace que se presenten algunas enfermedades con virus o agallas. ¡Tienes que estar muy al pendiente!
En cuanto a los hongos comunes en los claveles chinos tenemos a la roya. Por suerte para ti, te será muy fácil poder identificarlo. Cuando cualquier planta se encuentra sufriendo por este hongo desarrollará una especie de bultos anaranjados en la cara posterior de sus hojas. Algunas veces, también estarán presente en los tallos.