Ajo

El Ajo por siempre se ha considerado una fuente de medicina natural y es que las propiedades medicinales que contiene son muchas y lo mejor de todo es que se puede utilizar en la cocina, ya que su sabor combina en casi cualquier platillo. Sin duda, el ajo es muy utilizado en muchas partes del mundo para generar en las comidas un sabor agradable. El ajo se clasifica como una hortaliza y pertenece a las Aliáceas. En casa podemos tener una planta de ajo para qué así nunca falte en nuestra cocina ya que así, disfrutaremos de su sabor y aroma inigualable siempre que queramos.

En éste artículo brindaremos todo tipo de información esencial para que nuestros lectores tengan a su disposición un planta de ajo y le den los cuidados necesarios.

Cuidados del Ajo

Se debe tener en cuenta que esta planta no se la lleva bien con las temperaturas altas, sobretodo en el momento en el que se forman sus hojas. Nunca esta planta debe estar a más de los 30°C, ya que las hojas se pueden deformar, y no tendremos los resultados esperados. Si la temperatura llega a 0°C entonces el crecimiento de la planta se detendrá. Es una planta que no necesita muchos cuidados, si embargo se debe estar atento a las temperaturas en las que se encuentra.

Es una planta que necesita ser estimulada, sobre todo en los días que se comienza a formarlo los bulbos. Para que estos bulbos comiencen a formarse, la planta debe estar expuesta al menos a once horas de luz natural diarias, para que la formación sea completada con éxito la temperatura adecuada ronda entre 18 a 20 grados centígrados.

El Ajo no necesita mucho abono, sin embargo es recomendable utilizar de forma ocasional algún abono que contenga potasio, esto sin duda será de gran ayuda en el crecimiento la planta de ajo. La planta puede llevarse bien con el frío, sin embargo si existen congeladas intensas no crecerá. La tierra en la que se plante no debe ser muy húmeda, se recomienda utilizar tierra fina, sobre todo en la superficie de la plantación.

Es una planta que no exige tampoco muchos sustratos orgánicos, a pesar de que se recomienda utilizar sustratos orgánicos no frescos, ya que el sustrato fresco le puede generar daño.

Riego de la Planta de Ajo

Para el regado se debe tener en cuenta el clima en el  que se está, así que debemos estar atentos con las épocas lluviosas.  Si se encuentra en un lugar que es muy lluvioso, es recomendable no regar mucho, sino de forma ocasional, muchas veces es mejor que a la planta le haga falta agua y no que la reguemos de más.

Luego de tres semanas de cosecha, es recomendable no seguir regando los ajos, ya que de esta manera la humedad hará que los mismos se pudran. Es importante no regar más de la cuenta, ya que podemos perder nuestra siembra de ajo, por eso se dices mejor que falte agua a que sobre. Si llega la temporada de verano, se debe volver a regar la planta de ajo, ya que a altas temperaturas necesita un poco más de humedad.

Cómo cultivar el Ajo – Ajos tiernos

Para cultivar ajos tiernos, se debe hacer la plantación de la cabeza, para realizar esta acción se debe eliminar la piel protectora de cada uno de los dientes de ajo. La cabeza de ajo pelada debe colocarse a 10 centímetros de distancia. Los expertos en la siembra de la cabeza de ajo dejan la misma semienterrada, para luego tapar las mismas al momento en que comienzan a salirle hojas. Se debe destacar que por lo general se recolecta el ajo sin madurar, ya que el ajo que más se utiliza es el tierno.

Los bulbos formados tienen distinta cantidad de dientes, si se quiere sembrar el ajo seco, se utilizan los dientes de la cabeza de ajo, esta siembra se hace por lo general para los meses que inicia el  invierno, precisamente los meses de diciembre y enero, en ciertos sitios la siembra se comienza a hacer en la culminación de otoño.

Para los terrenos con menos humedad, se debe sembrar al menos a 3 cm de la superficie, la punta de los dientes debe ir en dirección hacia arriba. Los dientes se deben separar al menos 15 centímetros. Es importante destacar que el frío en extremo genera poco crecimiento en la planta, esto quiere decir que es una planta que le va bien con temperaturas un poco cálidas. Se recomienda usar sustrato rico en potasio, de esta manera tendremos una planta de ajo saludable que nos dará muchos dientes para nuestras comidas y medicinas naturales.

Enfermedades del Ajo

Son muchas las enfermedades del ajo, como por ejemplo los trips, que son su principal plaga, estos son incestos de un milímetro de longitud. El ajo puede llegar a sufrir de manchas purpuras, estas son causadas por hongo, el hongo daña principalmente al follaje de la pantas y eso produce menos ajos para nuestra cosecha, es una enfermedad que se produce en tiempos lluviosos.

La pudrición blanca es causada por otro hongo de color blanquecino, esto sucede al momento en que la planta se cubre con una especie de moho de color blanco. La otra enfermedad que puede afecta nuestra planta de ajo, es la pudrición radicular, en el mismo se nota resequedad en los bulbos y raíces del ajo.

Usos del Ajo

El ajo es una de las plantas que más usos tiene, y es que van desde lo medicinal hasta lo culinario, son muchos sus usos, aquí enumeramos una lista de los más importantes.

1. Gran fuente de vitaminas A, B2, B1 y C.
2. Usado para prevenir problemas en los riñones.
3. Reduce los niveles de colesterol.
4. Mejora la circulación.
5. Pata tratar problemas del sistema respiratorio.
6. Usado para desparasitar.
7. Para tratar el herpes.
8. Uso contra la enfermedad de la piel, eczema.
9. Mejora el sistema nervioso.
10. Usado para tratar las varices.

Además el ajo es utilizado para sazonar comidas, en muchos países tropicales el ajo molido se agrega los tostones fritos, además de que el mismo no puede faltar para aderezar las barbacoas de fines de semana.

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