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Jacaranda
La jacaranda es un árbol que tiene unas características interesantes, con unas ramas que pueden estar a más de 20 metros de altura (aunque la mayoría de especies están entre los 5 a 12 metros de altura), presentando una forma de una especie de copa casi abierta, algunas de sus especies presentan unas flores de un color lila muy llamativo, con frutos y semillas delgadas.
Este árbol presenta una cantidad de especies significativas, en total 49, siendo muy explotados para aprovechar la madera que dan, presentándose de manera natural en países como Brasil y Argentina.
Su tamaño al parecer varía dependiendo del sitio en donde se dé, por otro lado su nombre en sí tiene un significado especial en la lengua guaraní y es madera de olor muy fuerte.
Es probable que en una época del año este árbol pueda perder todas sus hojas, (normalmente en otoño – invierno) las cuales volverá a recuperar llegadas la primavera y el buen tiempo, adicionalmente el mismo tiene la capacidad de vivir más de 100 años. Sus flores además de ser muy hermosas por el color pueden llegar a medir unos 4 ó 5 centímetros.
Otros nombres comunes: Jacarandá, gualanday, tarco.
Nombre científico: Jacaranda mimosifolia
Origen: Brasil, Argentina y Paraguay.
Familia a la que pertenece: Bignoniaceae
Como plantar o reproducir el árbol de jacaranda
Lo ideal para poder plantar un árbol de este tipo es conseguir plantones de jacaranda, los cuales seguramente se podrán comprar en viveros o los podrá regalar algún conocido que ya tenga plantas de este tipo, en cuyo caso le podemos pedir un esqueje, que mida por lo menos unos 15 centímetros, aunque no importaría que fuese un poco más largo. Al igual que otras plantas lo único que debemos hacer es colocar el citado esqueje en un envase con agua y esperar que comience a emerger en este algunas raíces. Le podemos ayudar utilizando hormonas de enraizamiento.
Antes de seguir con la lectura, plantas y jardines les recomendamos estos 3 productos relacionados con la planta de jacaranda:
El siguiente paso es muy sencillo porque debemos plantar el esqueje resultante en una maceta, el cual debemos atender constantemente sobre todo regándolo, hasta esperar que el pequeño árbol se forme. De allí debemos replantarlo al lugar donde quedará en definitivo.
Otra de las opción (un poco más lento), pero con resultados excelentes, es comprar semillas de jacaranda, o bien extraerlas de algún árbol (suelen caer al suelo) y bien reproducir.
La mejor época para la siembra de semillas de jacaranda es primavera y principios de verano (entre finales de Marzo hasta finales de Junio).
Las podremos sembrar directamente en el suelo (sin enterrar demasiado), ayudará a germinar las semillas de jacaranda si la noche anterior la hemos dejado sumergidas en agua.
Luego en la zona que las pongamos, deberemos de mantener la tierra húmeda constantemente pero sin encharcar.
Las semillas de jacaranda empezarán a germinar pasadas 2 semanas y hasta mes y medio, aproximadamente.
Si quiere reproducir jacaranda mediante semillas, este vídeo en nuestro canal oficial de Youtube le será muy útil:
Jacaranda cuidados
La idea es tenerlo en un espacio donde drene fácilmente para así cuidar su crecimiento, por otro lado necesitamos que dicho suelo tenga unas características especiales y se mantenga con suficiente cantidad de nutriente y muy fértil.
Un árbol en crecimiento es preferible sembrarlo en una maceta para tener un mejor control, tanto en el riego como en el suelo de su crecimiento.
En su etapa inicial es importante regar el árbol con mucha regularidad, lo cual es sumamente necesario para lograr su crecimiento.
Es importante a la hora de sembrar este árbol conseguir un espacio lo suficientemente amplio, no olvidemos que va a crecer y a ocupar mucho espacio, si lo hacemos en un sitio muy reducido es probable que con el tiempo se marchite fácilmente.
Algo que debemos tomar en consideración es que este árbol no necesita ser podado, debemos dejar que sus ramas crezcan libremente.
Los árboles que se plantan por esqueje crecen mucho más rápido que aquellos donde se utilizan semillas, así que dependiendo de la necesidad que tenga de tener estos árboles la decisión está en sus manos.
Es importante que coloquemos los arboles de jacaranda donde estén expuestos al sol, además que se ven excepcionales por la claridad que les pega, dicha exposición también ayudará a que florezca de manera adecuada.
Bonsai de jacaranda
Si eres un amante de los bonsais, les queremos recordar que podremos hacer un bonsai con esta planta. Deberemos tener cuidado e ir podando a medida que lo vaya necesitando.
En primavera nos regalará unas flores preciosas.
Para que nuestro bonsai esté saludable, deberemos de tener especial atención a los riegos, además de tener que abonar periódicamente, ya que el espacio que tiene suele ser muy limitado, y necesitará de nutrientes.
Usos que tiene el árbol de jacaranda
Este árbol tiene un uso principalmente medicinal, destacando que de sus hojas, tallos y flores podemos sacar una infusión que ayuda notablemente en las infecciones gastrointestinales así como en la disentería. También se considera un emoliente, es decir que tiene muchas propiedades para controlar la dermatitis, además de inflamaciones y algunas otras durezas que se presentan en el organismo.
Por otro lado podemos mencionar que este árbol también se utiliza exitosamente para la fatiga mental, epilepsia, sífilis y algunas otras enfermedades venéreas.
No podemos olvidar el uso que se le da a sus troncos al convertirlos en madera.
Contraindicaciones del árbol de jacaranda
Es conveniente poder controlar su consumo en exceso, porque puede causar indigestión, adicionalmente en algunos casos su manipulación puede ocasionar alergias en la piel. No debe ser consumido por ningún motivo por niños, ni mujeres que estén embarazadas, ni en proceso de lactación.
¿El árbol de jacaranda es comestible?
La respuesta es si, a pesar de que su preparación solamente se da en té, el cual su consumo trae muchos beneficios a nuestro organismo.
Propiedades del árbol de jacaranda
Este árbol en sus hojas y frutos tiene propiedades antisépticas, espamolítica, antitumoral y antiamebiana.
Enfermedades que presentan el árbol de jacaranda
Una de los problemas que presenta este árbol es que se contamina con las llamadas cochinillas grandes, que cuestan mucho curarlas y que por supuesto debilitan bastante al mismo.
Se debe empezar a cuidar de este árbol desde que se siembra, desde que es muy joven tiene tendencia a que le aparezcan hongos por doquier.
Otras curiosidades del árbol de jacaranda
Realmente es un árbol que causa mucha inspiración, su color le puede dar una brillantez y resalte a cualquier lugar donde se encuentre.
Para su crecimiento es normal que la zona tenga alguna humedad, además que normalmente el clima debe ser templado, aunque también puede crecer en condiciones adversas a estas.
Existen muchos sitios que están adornados por las flores de este maravilloso árbol, resaltando siempre un increíble color lila, dichas flores se agrupan en unos pequeños racimos que pueden medir unos 25 centímetros.
El frío es su peor enemigo, de hecho en unos climas excesivamente helados pueden llegar a desaparecer fácilmente.
Es tan beneficioso para el ser humano que se calcula que unos cinco árboles de jacaranda tienen la capacidad de absorber el CO2 que emanan unos 700 automóviles. Entonces además de tener un efecto decorativo son una gran herramienta para contribuir con el cambio climático.
Es importante realizar la poda frecuentemente de estos árboles con la idea de poder preservar toda su estructura, además que esto beneficiara su aspecto y la manera como florea.
Un aspecto importante que tiene este árbol de jacaranda es que puede florear dos veces al año, brindando un espectáculo brillante, lo hace en otoño y también en primavera